El Presidente Sebastián Piñera destacó la publicación de la Ley de Modernización de las Policías, que refuerza la institucionalidad de Carabineros y de la PDI, así como la vinculación de la primera de esas instituciones con la comunidad.
“Sabemos lo absolutamente necesaria que es la labor de Carabineros y de la Policía de Investigaciones para resguardar el orden público, para proteger la seguridad ciudadana y para asegurar el Estado de Derecho y la democracia”, subrayó el Primer Mandatario, junto al ministro del Interior y Seguridad Pública, Rodrigo Delgado; la Subsecretaria de Prevención del Delito, María José Gómez, y jefes policiales.
La nueva ley es el resultado del Acuerdo Nacional para la Seguridad Pública, apoyado de modo transversal, e involucra a las dos policías. Sin embargo, uno de sus acentos está puesto en la reforma a Carabineros, puntualmente en cuatro ejes: modernización de la gestión; institucionalidad y gobernanza; control del orden público; y carrera y formación.
“Esta nueva ley, que comprende a ambas policías, es también parte esencial del proceso de modernización y reforma de Carabineros, con el cual estamos comprometidos y hemos trabajado durante años, de modo de poder dar todas las herramientas para que Carabineros y la Policía de Investigaciones cumplan con su rol fundamental: proteger a las personas y a las familias, darles paz, tranquilidad y seguridad”, sostuvo el Presidente Piñera.
Entre otros puntos, la nueva norma establece para ambas instituciones la obligación de elaborar un plan estratégico de desarrollo policial, con una proyección mínima de seis años, que definirá lineamientos de distribución del personal, de los medios de la institución, de compras e inversiones, así como pautas para su actualización.
Asimismo, se incorpora la obligación de denunciar faltas administrativas y de implementar un modelo de control interno para la prevención y control de conductas indebidas, que deberá contar con mecanismos de denuncia anónima.
En materia de control y orden público, la ley determina que la fuerza en el actuar policial podrá emplearse cuando sea estrictamente necesaria y en la proporción requerida para el desempeño de las funciones policiales, debiéndose, en la medida de lo posible, priorizar medios no violentos.
La Subsecretaria de Prevención del Delito, María José Gómez, sintetizó los avances que implica la nueva ley: “Este es un paso más en la modernización de nuestras policías. Esta nueva legislación nos permite avanzar en una mejor gestión de Carabineros y la Policía de Investigaciones en materia de auditoría y de planificación estratégica”.
La autoridad agregó: “También establece un mayor control civil sobre la gestión de ambas policías. Esta ley además fue fruto de un acuerdo nacional transversal entre distintos sectores. El desafío es seguir trabajando por la modernización de nuestras policías”.
